Uriarte Talavera
Reseña de una gran historia
Por: Lorena Vazquez-Mellado y Sandra Rodríguez
Durante más de cuatro siglos ha permanecido inmersa en la historia y en la tradición la técnica de la talavera que tiene su origen en Sevilla España en el siglo XV. Una mezcla de culturas presente en dicha técnica, que fusionan con la cultura indígena a finales del siglo XVI en la Nueva España –a partir la conquista-, creando un estilo con rasgos distintivos. Con la llegada de los Españoles al nuevo continente, los frailes Dominicos a falta de cerámica fina para sus fines religiosos y utilitarios mandan traer alfareros Españoles, los cuales se establecen, forman talleres y comienzan a compartir sus conocimientos con los ceramistas indígenas quienes aprenden la técnica. Ésta desde entonces permanece y se caracteriza por diversos procesos y etapas; amasado de los barros blanco y negro preparando la materia para torneado y moldeado de las piezas, posterior a esto pasa a la primera cocción, con lo que se obtiene el jahuete que es esmaltado, estarcidoy decorado. Así queda listo para la segunda cocción, con lo cual se origina su vidriado. Así, la loza estannífera o cerámica esmaltada se comienza a producir en el nuevo continente. Su fabricación en la Ciudad de Puebla data del siglo XVI momento en el que es introducida por los artesanos de Talavera de la Reina. Después de un gran florecimiento durante los siglos XVI y XVII, a finales del siglo XVIII enfrenta una caída a causa principalmente de la introducción de la porcelana china.
En 1897 llega a México un Catalán de 29 años; Enrique Luis Ventosa, poeta y artista que queda fascinado con la historia y el trabajo artesanal que había distinguido a Puebla del resto de México.Éste hace un estudio de la majolica de México que combina con sus conocimientos adquiridos en España. Comienza a entrevistar artesanos experimentados, publica artículos en la historia de la técnica y escribe poemas basados en sus tradiciones. Entre 1900 y 1905 decora cerámicas en el taller de Antonio Espinoza (propietario de un taller de loza importante en la ciudad). En ese tiempo se convierte en un artista reconocido en la tradición histórica de Puebla. En 1922 se encuentra con Ysauro Uriarte Martinez, un joven alfarero que recién había heredado el taller de su abuelo Dimas Uriarte, que había sido fundado aproximadamente entre 1823 y 1824 por Ignacio Uriarte.La colaboración entre Uriarte Martínez y Ventosa da lugar a la creación de piezas únicas de una técnica original, en las que se introducían motivos del arte precolombino, islámico, y chino, así como influencias Italianas y algunos toques de Arte Nouveaux.Después de la crisis que había vivido la Talavera, en la que, de 46 talleres sólo habían quedado 6 a la llegada de Ventosa a México, el trabajo de Ysauro Uriarte y Luis Ventosa restauraba y devolvía auge a la técnica y calidad a las piezas. A partir de este momento, nacionales y extranjeros voltean su mirada y comienzan a crear colecciones privadas que posteriormente se exhiben en instituciones como el MetropolitanMuseum of Art de Nueva York y en el PennsylvaniaMuseum of Art.
Ya en el siglo XX, en 1986 en la Ciudad de México con la más grande colección de Talavera en el mundo, se inaugura el Museo de Franz Mayer con 726 piezas del siglo XVI hasta el XIX. En la Ciudad de Puebla, José Bello y González y su hijo Mariano Bello atesoran la más grande colección de la ciudad en el museo José Bello y González.
El manifiesto histórico que la Talavera representa, genera a partir de los años 90 la valoración de una posibilidad que incentiva la expresión artística. Así, artistas de trayectoria como Jose Luis Cuevas, Raúl Angiano, Vicente Rojo, Alberto Castro Leñero, NunikSauret, entre otros, comienzan a crear series y piezas con un dinamismo plástico contemporáneo. El impulsor; Uriarte de Puebla. A partir de estas iniciativas, artistas poblanos como; Bernardo Arcos García, José Lazcarro Toquero, Miguel Pérez Ramos y María Eugenia Jiménez Melo, también contemplan la técnica como medio y soporte de la expresión plástica, creando piezas únicas que representan la tradición dentro y fuera del país, en galerías, museos y espacios culturales.
La Talavera logra permanecer en el tiempo por el trabajo de quienes, a partir de esta técnica han trasmitido de generación en generación una parte importante de la fusión de dos culturas. Por otro lado, debido a la riqueza de su técnica,representa para el artista una alternativa de expresión y creación dentro de las artes plásticas. Finalmente un medio cargado de identidad, tradición e historia.
http://www.uriartetalavera.com.mx
(Rita Pomade. «Talavera – Mexico’searthlylegacyfromthe City Of Angels»)